La música siempre ha sido un instrumento efectivo para la conexión espiritual y mental con Dios, por lo que el acercamiento es inmediato.
La música y la religión han jugado un papel integral en la vida humana desde los inicios de la civilización por ser un aporte útil para la relajación.
Los valores de la música litúrgica y las canciones religiosas fueron creados para alentar la participación y construir una comunidad mucho más alegre y activa.
Los halagos a Dios deben realizarse siempre con fuerza y alegría, dos elementos característicos en las letras de la música cristiana, como vemos en las canciones de Emi Molero.
Las raíces de estas formas musicales tradicionales se impregnan en el trabajo de nuestros músicos contemporáneos favoritos, tanto seculares como no seculares.
Impacto de la música cristiana en las alabanzas a Dios
Aunque el mundo continúa evolucionando, las instituciones religiosas y las prácticas espirituales predominantes continúan siendo preservadas a través de la música.
Sin lugar a dudas, las lecciones bíblicas, salmos, versículos y otros componentes de la Biblia, se aprenden mejor mediante una canción llena de significado.
Los niños y jóvenes se sienten mucho más atraídos por la música que por las predicaciones de los exponentes religiosos durante la celebración de la palabra.
La comunidad musical cada vez se encuentra creando nuevos temas moldeados e influenciados para las alabanzas a Dios.
Dentro del hip-hop, los raperos usan muestras, referencias o voces inspiradas en la iglesia cristiana, un ejemplo objetivo es «Jesus Walks» de Kanye West, que utiliza una mezcla de coros y armonías.
También existen otras canciones un poco más sutiles como «Blessings» de Chance the Rapper.
La música litúrgica tradicional se caracteriza por los órganos y la armonía, dos funciones musicales que juegan un papel importante en las canciones gospel contemporáneas como «Silver and Gold» de Kirk Franklin.
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